Congreso del PSOE de Córdoba

Ayer se celebraron los congresos provinciales del PSOE-A, todos en el ambiente de tranquilidad que da el sentirse ganador y gobernantes en el Estado, la Comunidad autónoma y en muchos ayuntamientos y las ocho diputaciones provinciales (salvo el de Málaga, como se esperaba). En Córdoba también lo hicimos, en una jornada intensa y, sobre todo, extensa. Se despidió el palmeño José Antonio Ruiz Almenara de la secretaría general, para dedicarse de pleno a la alcaldía de nuestra ciudad. Y solo hubo un candidato para este puesto, Juan Pablo Durán, que consiguió el 94 % de los votos, con un discurso que mira con seriedad y rigor (habló con claridad de los tiempos duros que vienen, gracias a la crisis económica) al futuro. Nos acompañaron el ministro de asuntos exteriores, Miguel Angel Moratinos (que pasó a formar parte de la ejecutiva provincial, como vicesecretario, junto a la exministra de cultura, Carmen Calvo), el vicepresidente de economía y hacienda de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, y el secretario de organización regional, el palmeño Rafael Velasco.

Fue un cogreso diferente, ya que dejó por voluntad propia el cargo, quien lo ocupara desde hace ocho años en un congreso ganado por la mínima, con un partido dividido en dos, desde que el guerrismo luchase denodadamente para hacerse con el poder (como lo consiguió en un durísimo congreso que yo viví como delegado, en el que tuvo que emplearse a fondo Carlos Sanjuán, lider de los guerristas andaluces). En estos tiempos se ha diluído la división interna. Y ayer quedó patente al presentarse un solo candidato, en un clima de calma casi total. Queda en el haber de Jose, como lo conocemos su familia y los que compartimos tareas con él desde hace 25 años (cuando fue elegido concejal en Palma del Río).

Pero esta situación hace que las disputas se centren en entrar en la ejecutiva, con cuotas territoriales, que el candidato a secretario general tiene que armonizar con los principios políticos que quiere desarrollar en su programa, principios que coinciden con los que desde el congreso federal se están imponiendo en la organización: renovación de cargos, juventud, paridad. Eso lo logró con la nueva ejecutiva, para lo que se amplía a 36 componentes. Aunque tengo que lamentar que ningún palmeño ni palmeña ha quedado entre sus miembros. Como también tengo que lamentar el escaso interés y nivel a la hora de debatir y enmendar la ponencia marco aprobada. Es más interesante el "pasillo" y las conversaciones para colarse en los órganos de dirección. Por eso, algunas cosas se "colaron" en ponencia y estatutos, que, creo, deberemos pronto matizar en bien del trabajo de nuestra organización. En todo caso, creo que podemos ser obtimistas, y el PSOE tiene otra oportunidad para hacer que nuestra provincia no quede relegada como hasta ahora.