viernes, 29 de agosto de 2008

Publicidad que gusta

Me han encantado siempre los anuncios televisivos de Martín, aunque no me gusta el vermú. Esos “cortos” cinematográficos en blanco y negro, con la estética de los años 50, o mejor, de los 60 del pasado siglo, luciendo deportivos descapotables, minifaldas en mujeres esculturales con maquillajes aptos para el pop art, con pelucas y grandes gafas de sol, hombres con trajes negros de corbatas finas, en medio del lujo de una sociedad “feliz” y despreocupada, aunque se acercase la época hippy, contestataria por la guerra de Vietnam.

Charlize Theron en 1998 protagonizó uno de estos spots publicitarios, donde se le veía junto a un señor mayor, que recuerda a Aristóteles Onassis, en un puerto de la Costa Azul francesa, y que es seducida por el famoso Hombre-Martini, con su habitual gesto de pasarse el pulgar por los labios. Ella abandona al millonario “madurito”, mientras su minúsculo vestido de punto se va deshilachando poco a poco. Aunque la marca del vermú nos impide ver lo más glorioso de su postrera anatomía. ¡Uf! ¡Menos mal que nos queda la imaginación!


2 comentarios:

  1. En este anuncio... por lo menos la protgonista tiene mas tetas que el tio "deseado" no es como el dolcce gabana.
    jajajaj
    Saludos

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  2. Muy buena observación, Hiperión. Un saludo del "hombre de negro con gafas". Jejejeje.

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