Bailando

"Bailando. Me paso el día bailando. Y los vecinos mientras tanto. No paran de molestar. " Así empezaba la letra de Alaska y los Pegamoides del tema Bailando. Alaska, por cierto, tan derechosa ella, debería recordarle su canción a los "nuevos vecinos", es decir, a los suyos, los del PP, que han criticado al candidato del PSC, Miquel Iceta, por sus bailes en los mítines de campaña en las elecciones catalanas del próximo 27. Estos vecinos no paran de molestar. Pues Andrea Levy ha llamado ridículo a Iceta. Y Xavier García Albiol ha dicho que "El espectáculo de ponerse a bailar con la que está cayendo en Catalunya es sobrante". No recordará que lo que sobraba era su mensaje contra los rumanos, equiparándolos a la suciedad.

Estos políticos de PP, del nuevo PP, se ha vuelto unos sosos. Parece que no tienen otra cosa que criticar a los socialistas, pues no encajan en esta "guerra de nervios" que vienen representando desde hace tiempo su partido y los independentistas de Artur Mas. Con lo que, de paso, son ellos los que ocultan los verdaderos problemas de la gente, engatusándoles con nacionalismos, banderas, himnos y demás monserga.

Mejor que dejen de ponerse solemnes y recuerden a otros políticos que también han usado el baile en sus actos. O se han relajado moviendo el esqueleto, como Soraya Sáenz de Santamaría, en la feria de Sevilla, bailando rumba.

Recordemos los bailes de Enrique Tierno Galván, que se lanzó al chotis antes que Esperanza Aguirre se hiciese famosa por vestir de chulapa en verbenas varias.

O a la misma Espe, que no se ha cortado un pelo danzando en público.

Por cierto, que también ha bailado con el mismísimo Mariano Rajoy, tan serio él. Y nunca les han criticado desde sus filas (como si no hubiera problemas importantes entonces...)

Desde otros ámbitos también hemos visto bailes sonoros, como la conga de Pablo Iglesias en el Día del Orgullo Gay.

O los famosos bailes de toma de posesión de la Casa Blanca, como el de Obama y su mujer mientras canta Beyoncé.

Porque si quieren criticar un baile, recuerden aquel que se marcaron Ana Botella y uno de Los del Río, bailando y cantando la Macarena, en presencia de Aznar, para publicitar un supuesto homenaje a Miguel Ángel Blanco, que pareció más un mitin festivo, que un emotivo recuerdo a una víctima del terrorismo.

En fin, que ya somos mayorcitos para que nos enreden con los bailes estos "molestos vecinos". Mejor, Señor Albiol, díganos cómo van a devolver lo saqueado por su partido a la sociedad española a costa de la crisis. Señor Iceta, usted ni caso. Y siga bailando si le apetece.