Hace dos años escribí una reseña del concierto de blues que pudimos disfrutar en Palma del Río, en el Teatro Coliseo. Una pequeña isla de la música de calidad que me gusta, en un océano de mezclas, remezclas, mixes, remixes y demás experimentos discotequeros, o de flamenquitos e imitadores de Operación Triunfo, como dije entonces. Los protagonistas fueron los miembros de la banda sevillana The Pure Tones.
Una banda de componentes experimentados, con 30 años dedicados a la interpretación, formando parte de grupos como Caledonia Blues Band, Los Perkins, o acompañando a leyendas como Johnny Winter o el español Raimundo Amador. Si los ves se notan los años de carretera, de escenario, de disfrute de una de las músicas más embriagadoras que nació gracias a los herederos de los que sembraron y recolectaron a la fuerza las plantaciones de algodón de los Estados Unidos. Son músicos fajados en conciertos en vivo, en pubs y locales que todavía guardan las esencias de las músicas que acompañaron a la rebeldía de las generaciones de jóvenes de los sesenta y setenta. Pues estos héroes de minorías, porque ésta, hoy por hoy, es una música de minorías, han sacado nuevo disco. Sí, increíble, que en estos tiempos de descargas en internet, alguien se atreva a sacar un disco sin ser uno de los preferidos de los pinchadiscos famosos (los Djs, los gurús del momento), sin contar con la gran industria.
La banda la componen Paco Martínez (guitarra), Andrés Palma (bajo y voz), Luis Martínez (guitarra), Domingo González (batería) y Manuel de Arcos (armónica y voz). ¿Cómo es su música?. Su estilo es tradicional, rítmico, sin concesiones a las modas. La armónica, instrumento poco usual en estos tiempos (y casi en todos los tiempos) tiene un papel relevante, es una “voz” más. También las influencias de Johnny Guitar Watson o B. B. King o Eric Clapton son reconocibles. Y en algunos momentos la voz solista me recuerda a Bob Dylan. Si no los viésemos, nos imaginaríamos a clásicos músicos negros, aunque con matices “blancos” (tipo John Mayall), actuar en un escenario. Sí, porque son músicos de “directo”. Se les nota. El concierto que vi fue estupendo, no solo por los temas y su ejecución, sino también por el “buen rollito” con los espectadores (estuvimos sentados en el escenario, al estilo de café teatro, en contacto directo y cercano con los músicos). La simpatía y el buen humor añaden una nota que hace más agradable la audición.
El disco, Howlin´, que han editado este año, recoge grabaciones de estudio y de actuaciones en vivo, de los años 2006 y 2008. En algunos temas se dejan acompañar por otros artistas (Esther Weekes y Nani Conde). Recoge nueve temas con más de 50 minutos del mejor blues del sur, aunque cantado en inglés, salvo el último tema del disco y algún instrumental: Bright lights, big city; Crosscut saw; Howlin´; Where´es he going; Kidney Stew; Heads Up; Since they told me; Memphis train; y Blues del Renault 6. En él se combinan con habilidad ritmos melódicos con otros más cañeros, siempre haciendo honor a su nombre, “tonos puros”, clásicos, valientes, honrados y sin artificios.
Hace unos días recibí el disco y lo he escuchado varias veces. Agradezco a Manuel de Arcos que me haya permitido conocer este magnífico trabajo. Lo recomiendo. Si os gusta el blues, no os lo podéis perder. Solo tenéis que visitar su web y podréis degustar algo de su producción. Y además hacer el pedido correspondiente. Merece la pena tenerlo en vuestra discoteca. ¡El blues vive!
La banda la componen Paco Martínez (guitarra), Andrés Palma (bajo y voz), Luis Martínez (guitarra), Domingo González (batería) y Manuel de Arcos (armónica y voz). ¿Cómo es su música?. Su estilo es tradicional, rítmico, sin concesiones a las modas. La armónica, instrumento poco usual en estos tiempos (y casi en todos los tiempos) tiene un papel relevante, es una “voz” más. También las influencias de Johnny Guitar Watson o B. B. King o Eric Clapton son reconocibles. Y en algunos momentos la voz solista me recuerda a Bob Dylan. Si no los viésemos, nos imaginaríamos a clásicos músicos negros, aunque con matices “blancos” (tipo John Mayall), actuar en un escenario. Sí, porque son músicos de “directo”. Se les nota. El concierto que vi fue estupendo, no solo por los temas y su ejecución, sino también por el “buen rollito” con los espectadores (estuvimos sentados en el escenario, al estilo de café teatro, en contacto directo y cercano con los músicos). La simpatía y el buen humor añaden una nota que hace más agradable la audición.
El disco, Howlin´, que han editado este año, recoge grabaciones de estudio y de actuaciones en vivo, de los años 2006 y 2008. En algunos temas se dejan acompañar por otros artistas (Esther Weekes y Nani Conde). Recoge nueve temas con más de 50 minutos del mejor blues del sur, aunque cantado en inglés, salvo el último tema del disco y algún instrumental: Bright lights, big city; Crosscut saw; Howlin´; Where´es he going; Kidney Stew; Heads Up; Since they told me; Memphis train; y Blues del Renault 6. En él se combinan con habilidad ritmos melódicos con otros más cañeros, siempre haciendo honor a su nombre, “tonos puros”, clásicos, valientes, honrados y sin artificios.
Hace unos días recibí el disco y lo he escuchado varias veces. Agradezco a Manuel de Arcos que me haya permitido conocer este magnífico trabajo. Lo recomiendo. Si os gusta el blues, no os lo podéis perder. Solo tenéis que visitar su web y podréis degustar algo de su producción. Y además hacer el pedido correspondiente. Merece la pena tenerlo en vuestra discoteca. ¡El blues vive!
Muchas gracias, _MARÍA_. Pienso lo mismo que tú, ya hay demasiada repetición de lo mismo. Algunos, de tanto usar la red como medio de propaganda panfletaria, van a terminar asustando a la gente del medio.
ResponderEliminarSaludos
El del bigote es una mezcla entre Constantino Romero y Labordeta, con esos parecidos seguro que se merecen una oportunidad.
ResponderEliminarNo lo dudes, Quinto Forajido. Son magníficos y te recomiendo que entres en su web para escuchar algún tema.
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