Marta Sánchez

Navegando por internet he encontrado esta foto antigua de la popular cantante pop Marta Sánchez. Es de uno de los conciertos en que se mostraba como la voluptuosa solista del grupo Olé Olé, allá por los años ochenta. El grupo adquirió gran fama gracias a la aparición en la gala de fin de año de Televisión Española (la única televisión de entonces) de 1987, en la que Marta, que había sustituido a Vicky Larraz, se convirtió en el objeto de deseo de muchos españoles, en competencia directa con otra de las sex symbol de la gala, la italiana Sabrina Salerno, cuya canción "Boys" se convirtió en el himno al descuido, ya  que un pecho asomó varias veces de su cazadora de cuero. Imagen que repitieron a la saciedad en tiempo real y a cámara lenta, para atento disfrute del personal. En los días siguientes los españolitos nos dividimos entre los admiradores de las curvas de estas dos "estrellas" de la canción, protagonizando verdaderas discusiones sobre las preferencias sobre la hermosura de ambos bustos cantantes. 

Pues, bien, la foto me ha recordado cuando el grupo vino a Palma del Río. Fue en el verano de 1988, en pleno éxito tras la polémica batalla de divas. Lo trajo el ayuntamiento al antiguo campo de fútbol. Y fue todo un acontecimiento, aunque no consiguiésemos el lleno deseado, tal vez por lo grande del auditorio. Mucha gente de fuera vino atraída por la fama, sobre todo de la solista. Recuerdo que esperé la salida del grupo al campo, por el túnel de vestuarios, junto a una valla y comprobé que, a pesar de su físico hermoso y repleto de curvas, su estatura no era la que esperaba. Esta fotografía, en el comedor de la antigua Hospedería de San Francisco, hoy Hotel Monasterio de San Francisco, junto al cocinero de entonces, Iñaki Martínez, nos da una idea de los componentes del grupo con ropa de paseo. Iñaki es algo más bajo que yo, y no soy precisamente apto para jugar al baloncesto. Eso sí, aunque no estuviese vestida de gala, Marta Sánchez nos muestra que es una guapa joven. 

Otra foto curiosa, para recordar otros tiempos en que la música era protagonista de nuestras vidas.