Como es costumbre, el último día del año también debemos asomarnos al mundo virtual, ese que hace tiempo nos conquistó, abriendo horizontes donde compartir con los demás seres humanos.
Ya le quedan pocas horas de vida a este 2015, un año repleto de vivencias, acontecimientos, hechos sobresalientes, buenos y malos. Un año que se suma a otros pasados, en el desván de nuestra vida.
Asoma por lontananza otro nuevo ciclo donde la Tierra, nuestro hogar, dará una vuelta más alrededor del Sol, nuestro padre en la Galaxia. Y con un día más que este año, para permitirnos obrar mejor, rectificar los errores, adquirir más sabiduría, para amar más a quienes nos rodean, para mejorar el mundo en que vivimos. Para disfrutar de esa maravilla que es la vida.
Entremos con salud y alegría en este nuevo año. Deseando a nuestros congéneres que los próximos días, semanas y meses les sean más benévolos que lo han sido hasta ahora.
Es lo que os deseo, desde Celtibético, este humilde blog, que seguirá su "viaje interestelar" por el ciberespacio las jornadas que se abren ante nosotros, en los 366 días que se avecinan. Que las fuerzas os acompañen y ¡Feliz 2016!
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