jueves, 14 de julio de 2011

Adidas y Nike ensucian los ríos con sus fábricas


Greenpeace ha iniciado una campaña para retar a Nike y a Adidas, en concreto, aunque va dirigida a todas la empresas textiles, para que dejen de contaminar los ríos con los vertidos de sus fábricas, especialmente, las que tienen en China. Os dejo con el contenido del correo que me han enviado:

"Nike VS Adidas. El reto detox de Greenpeace

Hemos identificado en una investigación a varias conocidas marcas internacionales del sector textil, incluidos los gigantes deportivos Nike y Adidas. Están relacionados con industrias ubicadas en China que en sus procesos productivos vierten tóxicos a los ríos.
Desgraciadamente, estas instalaciones no son más que la punta del iceberg. En muchos países se están liberando químicos peligrosos a las aguas, lo que las envenena y amenaza la salud de las personas y la biodiversidad.
Estamos acostumbrados a las increíbles campañas publicitarias de estas marcas, anuncios plagados de estrellas que desprenden dinamismo, acción, modernidad y competición. Así que nosotros hemos decidido crear nuestro propio anuncio para lanzarles a Nike y Adidas un reto: ¿Quién aceptará el desafío y será el campeón de un futuro libre de tóxicos?
Se parte de nuestra campaña y comparte nuestro anuncio en las redes"

Nos invitan a poner nuestro nombre en el anuncio que han hecho y así retar a estas empresas a comportarse como es debido. El vídeo es éste, y tu nombre saldrá al final, junto a los demás:
 

Si estás interesado en participar en la campaña y ver tu nombre, y que el spot lo vean tus amigos y amigas de las redes sociales en las que estás, pincha aquí y pon tu nombre en el recuadro. Y luego no olvides dar a los botones para compartirlo en Facebook y Twitter, o para enviarlo por correo electrónico a tus conocidos y amistades.


2 comentarios:

Euphorbia dijo...

De ellos en concreto no lo sabía pero era de imaginar. Hacen lo que estan haciendo la gran mayoría de grandes marcas (y no tan grandes) fabricar en China con costes bajísimos conseguidos gracias a la explotación laboral y también a la falta de control medioambiental.
Tendríamos que ser conscientes e intentar comprar todo lo fabricado aquí, aunque quizá ya sea tarde para eso, ya no queda casi industria que fabrique aquí.

Francisco Javier Domínguez Peso dijo...

Eso último que dice, Euphorbia, es el problema: que quedan pocas fábricas por aquí. La deslocalización de centros de trabajo es cada vez mayor, por los beneficios que comporta el que la mano de obra sea más barata en lugares, como China, con salarios más bajos, sin derechos laborales ni sindicales. Vamos, el paraíso liberal.