martes, 29 de diciembre de 2009

La fusión de los portales, el portal de Belén


Estamos en tiempo de  navidades y todos empezamos a recibir felicitaciones por correo ordinario o electrónico, como está ahora de moda. Hace tiempo circulaba un chiste por internet, donde nos felicitaban con el portal de Belén y salía una foto de la casa de Belén Esteban, con ella en la puerta. Tenía su gracia. 

Otra cosa circula también con profusión en estos días. Las fusiones entre empresas de todo tipo (las que no desaparecen) por su situación en la crisis económica: cajas de ahorro, constructoras, aeronáuticas, etc. Sin embargo las que están dando más que hablar son las fusiones entre medios de comunicación, obviamente por ser comunicadores los afectados y directamente los interesados. 

En el panorama de los medios se da por hecho cierto una clasificación por perfil ideológico de las audiencias. En la prensa escrita, El Mundo, ABC, La razón, por ejemplo, son considerados medios de derecha. El País o Público son etiquetados de periódicos de izquierda. Lo mismo ocurre en televisión. Antena 3 y Telecinco son medios en manos de la derecha. La Sexta y Cuatro son encuadrados en la izquierda de la audiencia televisiva. Ya  hace tiempo que se oyen rumores de matrimonios o fusiones entre televisiones. En algunos espacios de La Sexta se  hacían bromas sobre el resultado de las conversaciones entre su empresa (Mediapro) con la de Cuatro (PRISA-SOGECABLE), hasta con el fracaso de éstas. Era lo “lógico” según el esquema “ideológico”, pero la lógica (ésta) algunas veces está reñida con la realidad. Y ésta última nos ha sorprendido con las “campanas de boda” entre la televisión de Roures (La sexta) y Antena 3, y por otro lado la fusión de Cuatro (PRISA) con la de Silvio Berlusconi (Telecinco). Fusiones “contra natura”, entre no iguales.

Si, queridos y queridas, las televisiones hasta ahora más enfrentadas por su “línea editorial ideologizada” terminarán bajo el mismo paraguas empresarial. Eran de sobra conocidas las dificultades de PRISA por mantener Digital+ (antes fusionada con Vía digital, de Telefónica, que, por cierto, lanzó su canal de Tv por internet, Imagenio, haciéndole la competencia a su canal por satélite) y el deseo de desprenderse de Cuatro. Ya hay quien ha comentado la aparición forzada de las dos últimas televisiones, cercanas al gobierno y el resultado con el que nos encontramos. Es curiosa la coincidencia “premonitoria” que comenta El mundano en relación al premio Ondas concedido a uno de los reporteros más significativos de la cadena de Berlusconi. Lo cierto es que el panorama empresarial se “reordena” para salvar las cuentas de resultados y le irrupción de la TDT. Pero, ¿y el panorama ideológico y de contenidos?.

Empezaba hablando de Belén Esteban, una persona que ya casi todo el mundo conoce y cuyo curriculum vitae consiste en ser madre soltera de la hija de un torero famoso, y cuyo legado literario se puede resumir en aquella frase que dice: “Andreíta, cómete el pollo”. Ya es famosa contertulia (tertuliana se dice ahora) de programas de Telecinco y yo diría que casi el mascarón de proa de esta cadena. Su última “hazaña” ha sido hacerse la cirugía estética, para presentársenos hace poco con nuevo rostro ante las cámaras de los fotógrafos y de la televisión donde presta sus rentables (por la audiencia) servicios. Del lado de Cuatro (la novia de este “matrimonio de conveniencia” empresarial) pondríamos a Iñaki Gabilondo como referente informativo de talla nacional e incluso internacional, con trayectoria impecable en el mundo de televisión española y la cadena SER, que fue “fichado” para convertir al programa informativo de la televisión heredera de Canal +, pero en abierto, en líder. Ambas carreras son evidentemente incomparables. Famoseo y chismorreo por el lado berlusconiano, rigor y opinión sensata con ribetes progresistas del lado “prisáico”. 

¿Quién gana con estos esponsales?. Me temo que el magnate italiano. Desde el punto de vista económico, seguro (aunque salve a su rival de la bancarrota), por hacerse con el control de la tele en abierto y una parte de la televisión por satélite. Pero desde el punto de vista de los contenidos, también, y mucho más. Iñaki Gabilondo era una pieza a cazar por la derecha mediática desde hace tiempo. Y las ganas de haberle censurado, desde cuando lideraba audiencias en la radio, enormes. Siempre había estado a salvo, empero. Pero ahora le pueden aplicar una censura más efectiva, la del dinero. No digo con esto que le vayan a cortar las alas, no sería oportuno (aunque viendo la chulería con la que se comporta “el cavaliere”, no creo que tuviera reparos) sino más bien que, conociendo el cariz y el estilo de la cadena Telecinco, pronto se verá ahogado entre colorines, famoseo, “Andreítas”, “Jesulines”, operaciones de estética, “grandes-hermanos”, botox, y demás “plumas” con las que adornan sus programas. Y esto es lo que les pasa a otros periodistas “serios” que acuden a tertulias de esta cadena de televisión. Las de periodistas sobre temas de actualidad en el programa La noria son ejemplo de este enterramiento de lo importante, en medio del griterio y la frivolidad. Y todo a golpe de talonario. 

En fin, que, como muchos dicen ya, las noticias que hacen daño al dueño de Mediaset, como aquellas sobre escarceos con mujeres de alquiler, ya no tendrán sitio en la otrora cadena “progre” de PRISA. Y su periodista de relumbrón quedará (aún más) silenciado, ya no por la escasa audiencia de su medio, sino por la “hiper-inflación” de telebasura que, me temo, nos invadirá. 

De la otra fusión hablaremos otro día. Que de esta ya comprendo por qué en diciembre el portal de Belén, el canal de Belén, la Esteban, se nos terminará metiendo en todas nuestras casas, atragantándonos como de un atracón de polvorones. 


5 comentarios:

Jesús Herrera dijo...

¡¡¡Ja, ja, ja, ja..., y já!!!
¿Que la CUATRO TV y El País son de izquierdas, Francisco Javier?

¡Si la CUATRO TV y El País son de izquierdas, mis textines son clavellinas reventonas!

El gran drama de la izquierda en España es que no tiene periódicos, ni cadenas de radio ni de televisión. Ese es el gran drama. No nos engañemos.
La izquierda no tiene medios de comunicación ni tiene escuelas privadas como la Institución Libre de Enseñanza. Ese es nuestro drama.

Nuestro déficit es que la izquierda no dispone de ninguna 'herramienta' de las que se necesitan para cultivar y elevar el nivel cultural de las masas, para abrirlas el ojo y sacarlas de las garras de la internacional vaticanista y del carquismo imperante y creciente.

Se oye que la Tele5 absorverá a La Cuatro y que A3 absorverá a La Sexta. ¿Adónde quedará el supuesto izquierdismo de La Sexta tv?
Lo que sí te concedo es que el diario "Público", hay por hoy, es un periódico inconfundiblemente de izquierdas. ¿Quién le absorverá?

Salú.

Francisco Javier Domínguez Peso dijo...

Jesús, yo no considero a ningún medio de los que citas de izquierda. Digo que "se da por hecho cierto...", "son considerados", "son etiquetados", "son encuadrados" siempre hablando en tercera persona, como hablando de un tópico admitido sin discusión. Pero en el post deslizo la, en mi opinión, falsedad de este tópico, descubierta a las claras con los movimientos empresariales. El País fue siempre considerado el periódico de los "progres", y no me he creído nunca que ser de izquierdas y progre sean sinónimos. Por cierto, no me creo tampoco que Público sea de verdad de izquierdas, sino que tiene una línea "juvenil" e "izquierdosilla" en sus colaboradores. Fíjate que desconfiado soy,¡jajajaja!.

Saludos.

ego_mismo dijo...

ME GUSTA MUCHO LO QUE ESCRIBES Y NO TE CALLARAN COMO TAMPOCO LO HACEN CONMIGO FELIZ AÑO
SALUDOS DEL EGO

Francisco Javier Domínguez Peso dijo...

Por supuesto que nadie nos callará, ni a ti ni a mí. Saludos ego_mismo, feliz año.

Francisco Javier Domínguez Peso dijo...

Y gracias por decir que te gustar el blog y pasarte por aquí, ego_mismo