viernes, 18 de septiembre de 2015

La foto del viernes: la boda de Javier Maroto


Javier Maroto es uno de esos nuevos líderes, jóvenes y poco conocidos, de los que se ha rodeado Rajoy para dar un impulso a la nueva imagen del PP. Ya causó asombro el saberse que era homosexual y tenía novio. Más asombro causó la noticia de que Mariano Rajoy fuese invitado a la boda, ceremonia que se ha celebrado esta mañana en el ayuntamiento de Vitoria, donde este hombre es portavoz de su partido. ¿Iba a ir o no iba a asistir a la ceremonia el presidente del PP? No pocas controversias se han producido, siendo Rajoy el jefe del partido que presentó recurso ante el Tribunal Constitucional contra la reforma del Código Civil que permitió que se pudiesen casar personas del mismo sexo, entre los dirigentes del PP y sus apoyos, entre los que se encuentran los ultras contrarios a la reforma legal que realizó el PSOE. Parece que Mariano ha optado por una situación intermedia ante la polvareda levantada cuando anunció su presencia en la boda. La ceremonia ha sido casi privada esta mañana y no ha asistido Rajoy, pero esta tarde es la celebración y está prevista su presencia, junto a otros dirigentes del partido y del gobierno. Está pero no está, vamos. Los enemigos del "gaynomio" (como le llaman los ultracatólicos) pueden estar tranquilos: Rajoy no ha "consagrado" con su presencia la ceremonia. Aunque los "progres" del PP también tienen su contento: "celebra" en definitiva la boda, al asistir a la fiesta. (La foto no es de la boda, es de archivo, pero bien podría ser semejante a alguna de las que se tomen hoy. ¿Veremos algo así mañana en la prensa?)

2 comentarios:

Jesús Herrera Peña dijo...

No pasan ninguna vergüenza.
Defienden una cosa y la contraria y las dos las defienden con el mismo ardor guerrero.
¡¡¡HIPÓCRITAS!!! ¡¡¡SINVERGÜENZAS!!!
Enhorabuena a los que los votaron antes y piensan en votarlos próximamente. Han dado con la horma de su zapato.

Francisco Javier Domínguez Peso dijo...

No pasan vergüenza, porque no tienen. Ya les animó hace tiempo Aznar: "¡Sin complejos!" (es decir, sin vergüenza. Y encima se han hecho las fotos en la ceremonia, como si fuesen a una boda religiosa, de esas que tanto les gusta.