jueves, 17 de febrero de 2011

El asador "asado"

El dueño del asador rebelde tira la toalla y acata la ley antitabaco

Estaba dispuesto a "morir matando" frente a un Gobierno "dictatorial". Ahora, sin embargo, el dueño del 'Asador Guadalmina' de Marbella José Eugenio Arias, ha tirado la toalla y cumplirá la ley. Después de que la Junta de Andalucía cerrara provisionalmente su restaurante por permitir fumar en su interior, ha presentado un escrito ante la Consejería de Salud mostrándose dispuesto a acatar la reforma de la Ley Antitabaco. Por ello, este departamento procederá a la reapertura del establecimiento.



"En el día de hoy, cautivo y desarmado el camarero fascista, han alcanzado las autoridades sanitarias sus últimos objetivos saludables. La guerra ha terminado."

9 comentarios:

Euphorbia dijo...

No se en qué debían estar pensando estos insumisos, debían estar ya muy mal para arriesgarse así, ahora si les dejan volver a abrir ya tienen la publicidad hecha.

Y qué bien se está ahora en cualquier parte sin tener que aguantar humos...

Francisco Javier Domínguez Peso dijo...

Aunque yo no hubiese sido tan drástico con la prohibición. Pues sí, Euphorbia, se está estupendamente ahora en bares y restaurantes sin salir luego apestando a humo.

Estos sinsumisos de opereta bufa y facha han conseguido algo de publicidad, pero es efímera, porque la competencia cumplidora de la ley se ha encargado de no dejarles salirse con la suya. Recuerdo los comentarios en la prensa on line de muchos competidores.

Octavio Junco dijo...

¿Por qué los españoles tenemos esta propensión a politizar lo que no tiene carácter político, como es el caso de la ley que prohibe el uso del tabaco en espacios públicos cerrados?
Yo he saludado esta medida sanitaria con satisfacción, sin poner en juego valoración política alguna.
No tenemos remedio.
Saludos.

Jesús Herrera Peña dijo...

No, no; la guerra no ha terminado.
Queda todavía librar esas batallas de esos pueblos de España-paña en los que se ha hecho (y se seguirá haciendo) la circunvalación de las carreteras que pasan por el centro de sus cascos urbanos.
Los dueños de los bares se lamentan con mucho dolor —y tienen razón— que les disminuirán los clientes; que ya, muchos de los que pasan en automóvil harán pereza de coger el desvío hacia el pueblo para tomarse una cervecita o un cafelito.

¡¡Ay, señor, señor!! ¿Adónde nos lleva Zapatero?

Octavio Junco dijo...

Ah... se me olvidaba decir que también saludaré con alegría la medida que prepara Tráfico para reducir a 30 Kms. por hora la velocidad máxima de los vehículos en vías urbanas de un único carril por sentido, especialmente en las calles céntricas.
¡A ver si los ayuntamientos se convencen de que ir a velocidades superiores por calles como Feria, Portada, Cigüela, Ancha o Nueva, por poner como ejemplo a nuestra ciudad, es una temeridad y una gravísima desconsideración con los ciudadanos que caminan por ellas!
Que tales calles fueron trazadas cuando no existían vehículos motorizados, y que el derecho del peatón prevalece sobre el privilegio del conductor en todo país civilizado.
Y que no nos salgan con argumentaciones políticas de derechas o de izquierdas, que eso es trivializar la política y tomarnos por analfabetos.
Saludos y gracias.

molinero dijo...

Ye estoy encantadito con eso de entrar a los bares y no tener que aguantar las fumarolas que alli se encontraban, y el pestazo que llevabas en la ropa cuando llegabas a casa. Sobre todo porque tengo alergias y me sienta muy mal los ambientes cargados de humo.
Estos "insumisos arrepentidos", aunque les permitan reabrir su bares, no parece que se vayan a librar de la suculenta multa, al menos el del "Guadalmina". Todavia hay Quijotes que luchan contra gigantes.
A mi también me parece demasiado drástica la prohibición, pero cuando nos acostumbremos a vivir asi no lo veremos tan grave y la gente podrá seguir fumando en las calles o en su casa sin molestar a los que no fumamos ni queremos fumar humos de otros. En otros paises de Europa es parecido a lo de España y no pasa absolutamente nada.

Saludos

Francisco Javier Domínguez Peso dijo...

Octavio tal vez este señor haya politizado este asunto para buscar publicidad gratis entre un sector concreto, ahora dispuesto a consumir propaganda a troche y moche.

Respecto a lo de los límites de velocidad estoy de acuerdo, incluso que no es un asunto ideológico, aunque algún papanatas se atreva también a politizarlo.

Un saludo.

Francisco Javier Domínguez Peso dijo...

Pues a dónde nos va a llevar, Jesús, al infiernoooo!!!!! Cualquier cosa vale para montar una manifestación en estos tiempos en que los que antes reprimían los derechos, ahora le ha cogido el gustito a la calle.

Francisco Javier Domínguez Peso dijo...

Supongo que sí, molinero, que nos terminaremos acostumbrando, como con otras cosas. Y también espero que les multen, por chulos. Es una pena tener que hablar de ellos con la expresión "insumiso", que tantos recuerdos me trae de mis tiempos de objetor de conciencia. Pero esas eran otras causas, creo que más nobles, por las que luchar que estas "rebeliones de fumetas". Además si se deja el tabaco, como hice yo hace 14 años, se vive mucho mejor.

Saludos. E intenta conseguir, si puedes, que en tu casa tampoco se fume, jajajaja.