Ayer, el juez de la Audiencia Nacional, Baltasar Garzón, ordenó el ingreso en prisión de la alcaldesa de Arrasate-Mondragón, por "colaboración con organización terrorista y quebrantamiento de medidas cautelares", al incumplir el auto de suspensión de ANV, del pasado 8 de febrero. Aquella que se tomó vacaciones cuando el asesinato del ex concejal socialista, Isaías Carrasco, y se negó a condenar el atentado.
¡Qué sarcasmo!. Se llama “Inocencia”. Y ¡qué casualidad!. Después de la orden de prisión, ETA pone tres bombas, una de ellas en el Instituto Oncológico de San Sebastián. Los enfermos vascos de cáncer entenderán hoy “en carne viva” el “amor” a su mítica patria vasca y a sus habitantes (sean o no de pura raza euskalduna), que tienen los aguerridos gudaris de ETA. Hay gentuza que no sabe hacer otra cosa que destruir. ¡Y encima hoy! ¡Estos que se llaman a si mismos la “izquierda abertzale”!...Atacando además, por cierto, dos instituciones laborales, unas dependencias el ministerio de trabajo y el organismo de salud laboral del gobierno vasco.
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