Quijote Losantos se siente traicionado en el juicio

Fegueguico está triste, ¿qué tendrá Fegueguico?. Triste y más cabreado que nunca. Según su relato del juicio por la querella de Gallardón, sus fieles “legionarios” (recuerdan: ¡a mí la legión!), periodistas y políticos, le han dejado solo al testificar. La tarde de ayer ha sido una decepción para nuestro héroe: su queridísima Esperanza Aguirre (ay perdón, que esa forma de hablar es propia del gran traidor marxista Gallardón) ha dicho que no recordaba que Gallardón quisiera pasar página sobre el 11M y pactar con los socialistas. Eso mismo que le motivó para soltarle la retahíla de improperios por los que se sentó ayer en el banquillo. La misma respuesta soltó el segundo de a bordo de la lideresa en la Comunidad de Madrid, Ignacio González. Pero el colmo es que Acebes, el gran Ángel Acebes, al que tanto defendió y ahora usa como otro dardo envenenado contra el socialdemócrata Rajoy, dijo de Gallardón que "no discrepó. Esencialmente no, en algún matiz quizá, pero esencialmente no, estábamos de acuerdo". Vamos que tampoco le dio la razón y le dejó sin argumentos para defenderse. Lo comenta en su digital “particular”, Libertad Digital. Y concluye su diatriba así:

A la salida de la sesión, hasta los de las televisiones zapaterinas y, por ende, gallardonitas, aparecían demudados. "¿Se siente usted traicionado por sus testigos?", me preguntaban. Y yo les dije lo que siento: "Si me fiara de los políticos no sería liberal." Pero la causa de las víctimas del 11-M, de la verdad y de la Justicia sigue valiendo la pena. España parece ya madura para la dictadura gallardonita y el PP listo para Bulgaria, pero no todos los españoles. Yo, como dijo Sancho, "abrenuncio". Vamos, que ni hablar.

¡Ea! Que, aunque solo, este singular desafío la gano yo, ¡por mis huevos!.