Después del jarro de agua fría que ha echado el FMI negando las previsiones que el gobierno incluye en el proyecto de Presupuestos Generales del Estado para el año que viene, los ministros han saltado en tromba a criticar al Fondo. Incluso la Ministra de Empleo (que cachondo es este gobierno con los nombres de los ministerior) ha dicho que los presupuestos se basan en "un cuadro macroeconómico creíble". Y no parece que se haya inmutado al decir esa palabra: "creíble". ¿Alguien en su sano juicio puede creer ya a estas alturas al Gobierno de Rajoy? Ni siquiera quienes dictan desde fuera las recetas de ajustes le creen. Y eso de crear empleo, cuando se prevén cifras astronómicas de paro (el 25,1%) para el año 2013 y su reforma laboral no ha hecho otra cosa que destruirlo... Si no hubiera dicho eso la ministra en el Senado, pensaríamos que vendría algo "nublada". Estamos en octubre y el oktoberfest (la fiesta de la cerveza, originaria de la alemana Munich) está en pleno apogeo. Lo mismo Báñez se ha dado un vuelta por Baviera, para recibir instrucciones de los ministros de la Merkel, y de paso se ha refrescado el gaznate un poco. O se ha pasado con el zumo de cebada, porque nosotros ni tras la décima cerveza nos creeríamos sus palabras. ¡Que engañe a otros con sus "creencias"!
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