Esperanza Aguirre también se busca un puesto en la empresa privada

¡Qué equivocado estaba! Yo que pensaba que Espe no nos iba a dar más "alegrías" que comentar en este blog, cuando se despidió de la Presidencia de la Comunidad de Madrid. Que se iba a quedar de ejemplar funcionaria, con su sueldo recortado y con la jornada laboral ampliada. Y no. A pesar de decir que volvía a la función pública con ilusión, y al turismo, que es su profesión, la lideresa del PP madrileño, que no ha dejado de ejercer como tal, se ha pasado a la vida privada laboral y la han fichado para dirigir una empresa de "cazatalentos", ni más ni menos que ¡catalana! Pues mira que eso da para mucho, sí.

Después de conocer el jugoso futuro que le espera a su antiguo Consejero de Salud, Juan José Güemes, la lideresa debe haberse comido las uñas de envidia y ha cambiado la moqueta oficial por el parqué de las grandes empresas de liderazgo, nunca mejor dicho. Ella, que no llegaba a fin de mes con el "ridículo" sueldo de presidenta, conocerá por fin las "excelencias gratificantes" del mundo privado. Turismo seguro que hará, pues la veremos viajando y seleccionando las mejores "cabezas" (y cuentas corrientes) para poner al frente de esos negocios que pongan en sus experimentadas manos, repletas de contactos, influencias y amistades. Aunque tampoco se pueda quejar de haber viajado poco en sus cuatro meses de funcionaria, ya que se los ha pasado dando ruedas de prensa aquí y allá, y a cualquier hora. Seguro que la jornada laboral ha sido lo suficientemente elástica como para permitirle el tiempo libre necesario para tanta comparecencia ante los medios de comunicación. 

Que la fiche una empresa catalana tiene, sin embargo, su miga. Ella, tan madrileña, castiza y de la España cañí. ¿Sucumbirá ante las bondades del sobernanismo catalán? Supongo que no. A raíz de las palabras de su nuevo "jefe", el Presidente de Seeliger & Conde, la han fichado por sus "valores" (imagino que morales y monetarios). En ellos incluirá sus contactos con  la Administración, su nacional-catolicismo y su españolismo fuera de toda duda. Amén de su "espíritu de sacrificio, lucha por el esfuerzo, la responsabilidad, el hablar claro, su optimismo y su valentía." Ya vemos cómo se sacrifica... y no los parados, sobre todo andaluces, que no quieren trabajar y solo prefieren las mamandurrias, claro. Su esfuerzo cumpliendo las 37,5 horas semanales de funcionaria, entre rueda de prensa, visita a la sede del PP y otras funciones como presidenta, es "evidente" (¿trabajaría de noche en el ministerio?). Y por supuesto que ha hablado claro cuando ha defendido a Carromero, negando legitimidad a los tribunales cubanos, aunque se niegue a hacer lo mismo con los del Franquismo. Está claro que en Cuba hay una dictadura, y en la España de Franco no. Claramente liberal.

¿Podemos tener dudas de su capacidad para la selección de personal? A la luz de los fichajes de la Gürtel no. Casi todos se libran de la acción de la justicia y pronto se librarán todos, al tiempo. Está meridianamente claro que sabe rodearse de lo mejor de lo mejor, lo más chachi, lo más in. Algunos piensan incluso que lo de su salida de la Comunidad de Madrid confirma su capacidad de liderazgo y conocimientos técnicos para escoger a los mejores. Su sucesor ha impuesto medidas que el mismo gobierno de su partido en Madrid ha impugnado en otros lugares, como el pago de un euro por receta médica. Y no pasa nada. Encima privatizan a destajo guardándose un puestecito para el futuro en las empresas adjudicatarias. Son listos, sí. Ella misma se ha vuelto a colocar, confirmando la recuperación económica que nos quieren vender en estos momentos en que la crisis arrecia sin piedad. Y, para colmo, podríamos estar pensando en una operación de largo alcance. Tal vez en situarse como sucesora de un Rajoy cada vez peor valorado y con peor imagen en las encuestas. ¿No será que cazar talentos sea el primer paso para otra caza, la caza mayor? Veremos.