lunes, 14 de diciembre de 2009

En defensa de El Gran Wyoming

En los últimos tiempos estamos observando a "intelectuales" (¿cogéis la ironía?) de la derecha expresarse con la "delicadeza" que les caracteriza gracias a sus principios ideológicos.

Cuando el secuestro del barco Alakrana, el finísimo analista político, Alfonso Rojo, director de ese medio líder en lectores por todos conocido, Periodista Digital, soltó en otro medio de comunicación (Intereconomía TV, gran y plural medio, ¿nos entendemos?) unas frases muy respetuosas de los derechos humanos, debido a su tajante e incombustible defensa del derecho a la vida (de los fetos occidentales, por supuesto): “Se haga lo que se haga, después de esta crisis, hay que bombardear y convertir en una era Somalia. De verdad, ¿eh? Aquello hay que dejarlo como una era”. Alguien le replicó: “¡Con todos: familias, mujeres, niños, familias, gatos! ¡Todo!”. No solo no rectificó, sino que añadió: “¡Todos! ¡Todos que sirvan para alimentar a los atunes!”. A nadie se le ocurrió entonces llamarle asesino o genocida. Y me refiero a nadie de la izquierda, claro, porque la derecha le aplaudió la "gracia".

Hace algunos días el periodista, Hermann Tertsch, ahora otro de los adalides de la "furia española" con que nos "endulzan" los oídos y la vista (está en Telemadrid, coto privado de Esperanza Aguirre) los susodichos "intelectuales patrióticos y liberales", en relación al secuestro de tres cooperantes catalanes en Mauritania, reivindicado por Al Qaeda, soltó otra perla: "les aseguro que si yo tuviera que matar a quince o veinte miembros de Al Qaeda por liberar a nuestros compatriotas lo haría sin ninguna duda". Tampoco salió la derecha, esa a la que se le llena la boca del derecho a la vida y que recuerda el GAL al PSOE cada vez que quiere hacerle el máximo daño, condenando semejantes palabras que incitan a la muerte de otras personas. Solo se le ocurrió al programa de La Sexta, El Intermedio, hacer una parodia tras exhibir un vídeo de este periodista con esas "piadosas" palabras, haciendo un montaje con la frase, manipulada para incluir otros colectivos o personas (ministros, pacifistas, menores...) que podrían ser víctimas de semejante medida y donde se insinuaba que con este método se pondría en peligro en España y el mundo, las libertades y el pluralismo, usando métodos expeditivos, como los que declaraba Tertsch.

Pero, ¿cuándo sale la "diestra caverna" a la palestra?. Cuando el periodista ridiculizado en el programa de El Gran Wyoming sufrió una agresión al salir la semana pasada de un local de copas. Ahora sí. Abrió el fuego Esperanza Aguirre con palabras que relacionaban el vídeo satírico contra Tertsch y la agresión sufrida, "por discrepar" con el gobierno. Cualquier agresión es condenable, pero también es condenable la denuncia falsa, como la que provoca Esperanza Aguirre con su vinculación entre la patada y la parodia. El propio periodista ha desvinculado la agresión sufrida, respecto del programa de La Sexta donde le parodiaban, aunque se haya querellado contra Wyoming, por llamarle asesino. Pero la campaña está en marcha: "Hay que linchar a Wyoming". Esa parece la consigna: considerar al periodista de Telemadrid una víctima política. Y a la derecha le encanta ponerse el disfraz de "víctima del terrorismo".

Wyoming no deja indiferente a nadie. Su ironía, su sarcasmo, su humor, aderezado con mucho arte y el don del histrionismo, hacen daño a sus adversarios, porque este hombre no oculta su ideario político y zahiere con efectividad a sus oponentes. Y algunos (el PP, sus cachorros, la prensa fiel al aznarismo, la extrema derecha política, social y hasta religiosa) se la tenían jurada y quieren aprovechar esta oportunidad (oportunismo puro y duro, trufado de mentiras) para cargárselo. ¿Cómo?. Acusándole de provocar la agresión.

¡Menuda cobardía!. ¿Qué dirían si alguien hubiese acusado a Alfonso Rojo de provocar el secuestro de los cooperantes, por su arenga para arrasar un país musulmán?. Nadie lo ha hecho, pero, claro, es que a la izquierda, y a los que somos honrados, no se nos ocurriría semejante maledicencia, semejante calumnia. Esa es una gran diferencia entre esos "militantes mediáticos ultras" y sus secuaces, y los demás ciudadanos. Los ciudadanos que no relacionamos sus sátiras con otros asuntos, como la agresión, que parece ser fruto de una discusión de "barra de bar". Esos ciudadanos hoy defendemos a Wyoming.

Los conservadores nunca han visto con buenos ojos a quienes han criticado sus convicciones o sus costumbres. Y si esa crítica ha sido además con humor, han reaccionado siempre con furia y exigiendo "cortes de cabeza". No demos pasos atrás, no permitamos que los ultras se cobren la cabeza de Wyoming, la libertad de expresión, la verdad y la justicia quedarán en entredicho.

13 comentarios:

Ruth dijo...

A mí me asusta cuando comienza a hacerse campaña para pervertir el concepto de la libertad de expresión. La libertad de la señora Aguirre, por citarla como cabeza "malpensante" de todo este movimiento, empieza cuando acaba la libertad de Monzón. Contra la crítica no cabe la difamación, por mucho que quieran decir lo contrario a base de soflamas, de demagogia y de enfrentamiento.

Francisco Javier Domínguez Peso dijo...

Lo irónico del asunto es que quienes consideran la patada en la espalda a Tertsch como un ataque a la libertad de expresión, mienten para atacar la libertad de expresión de los demás, personalizados en Wyoming. Es una trampa asquerosa para que siempre sean los mismos los que campen a sus anchas en este país, como cuando Franco.

Alberto dijo...

El único que se autodeclaró con instinto asesino fue el propio Terch.. y claremente además..
Como permite Espe eso?

Wyoming es grande y su humor buenísimo e inteligente..

un abrazo

Francisco Javier Domínguez Peso dijo...

es lo que digo, Alberto. Con mentiras buscan "liquidar" a Wyoming. Es la estrategia de la derecha actual.

Jesús Herrera Peña dijo...

Me solidarizo con El Gran Wyoming; con todo lo que representa, con su ideología, con su lucha pacífica, con su buen hacer dentro de una televisión que para mí es como una palmera en el desierto: La Sexta TV y sus programas de humor.
Me solidarizo con La Sexta TV, única televisión un poquito de izquierdas dentro de ese bosque de televisiones españolas públicas y privadas copadas por ideologías carcas de derechas extremas.
¡¡Ánimo, Chechu, no estás tan solo!! Yo también te sigo a diario en el teleprograma "El Intermedio".

Salú.

Anónimo dijo...

Creo que va a ser difícil echar a Wyoming, ya que ni gobierna el PP, ni la cadena es de Berlusconi. Y espero que no lo quiten por que yo lo veo to los días!!

Anónimo dijo...

bienvenidos a la españa autentica, sin prejuicios ultras
mientras no me tocaba a mi no dije nada, estaba en un bar y escuchaba la catalanofobia,pero no iva conmigo
losn catalanes nos iremos y ese dia estareis a solas con ellos.con sus desfiles, su aire marcial, todo bendecido por obispos con gafas oscuras que os coartaran toda vuestra libertad. no penseis sobre la sociedad en que vivis. tranquilos - la culpa los polacos

EL QUINTO FORAJIDO dijo...

Las acusaciones infundadas de los medios ultraconservadores estan dentro de la linea grotesca e irresponsable de oposición del PP. Me ha encantado la entrada yo veo al Wyoming a diario y es lo mejorcito de TV.

Un saludo.

Aprendiz de Mucho dijo...

Lo del señorito German tiene bemoles, ¿Si no vio nada ni a nadie y le golpearon por la espalda, como sabe que fue una patada?.
Otra interrogante..¿Como sabe que fueron dos?.
Otra: ¿como sabe que eran profesionales, le dejaron factura o fractura?.
Otrora: Que cojones hacia un tio facha e impresentable de comunion semanal, boracho a las 6 de la mañana en un bar de una zona Gay?
continuará...

Francisco Javier Domínguez Peso dijo...

Menos mal que tenemos La Sexta, ¿no, Jesús?. En mi casa también somos forofos de esta tele. Salud.

Yo también respiro aliviado, Manué. Espero que dure mucho, aunque ya se lo hayan cargado en otras cadenas.

Anónimo, no todos echamos la culpa a los catalanes de todos los males de este mundo. Tranqui.

Gracias por tu opinión, Quinto Forajido, bienvenido. Comparto tu comentario.

Aprendiz, parece que la policía está ya contestando a esas preguntas que haces y nos hacemos todos los que no lo consideramos otra víctima del terrorismo (estilo Alcaraz) para atacar a la izquierda, como siempre. Hasta el mismo Tertsch ha desmentido la relación con sus lesiones y el programa de Wyoming o la política. Por otra parte, el que alguien de la "derecha mediática furiosa" frecuente locales gays nos es más que una prueba de su hipocresía ante lo que ellos consideran, "de micrófonos hacia fuera", una enfermedad. ¡Si todos los carcas gays saliesen del armario....!

jeriko dijo...

"wyoming es grande y su humor buenesimo"

Desde mi punto de visto desfasado y para abueletes,Por algo le tuvieron que echar de la 1 a patadas, y la sexta su canal, no tiene unos muy buenos resultados que digamos (y eso que tiene unos anuncios del gobierno muy majetes), pero al ritmo que va la sexta no durara mucho.

Francisco Javier Domínguez Peso dijo...

Jeriko, a todo el mundo no nos gusta el humor de cada profesional que sale en los medios. Pero por desfasado no lo echaron de la 1, fue por discrepancias políticas. Cosa que me pareció mal, porque no se debe censurar, aunque lo hiciera, si mal no recuerdo, el gobierno de Felipe González. El problema de La Sexta, hoy día, es que está en la TDT y aun existe el analógico. Veremos el año que viene con el famoso apagón si remontan las cifras. Además está la dichosa crisis. Vamos que no creo que Wyoming tenga la culpa de todo.

Aprendiz de Mucho dijo...

Puesa mi el humor que me gusta mucho es el de Jeriko.... jajajaja. ¡Eres bueno, muy bueno! (dixit R. de Niro)