jueves, 18 de mayo de 2017

Feria de mayo de 2017, y recuerdos


Como anunciaba ayer, con motivo de la publicación de mi artículo en la revista de feria, hoy se inicia la Feria de Mayo de Palma del Río. Una feria que podremos disfrutar gracias al buen tiempo, que las previsiones meteorológicas nos auguran. Aunque no tengamos ya las fuerzas que de jóvenes nos impulsaban a gozar el máximo de tiempo posible de estos eventos festivos, seguro que no faltaremos a la cita diaria en el Paseo. Y, una vez más, eso me impulsa a hablar de recuerdos. Primero por la fotografía que me facilitó un primo, que vive lejos de nuestro solar de nacimiento, donde aparece mi madre, de joven, vestida con el popular traje de gitana, el de la época, cuando todavía estaba soltera. Se le ve contenta, luciendo su vestido de lunares, y posando antes de salir al recinto ferial, con el mantón y las flores en el pelo. Desconozco la fecha, pero intuyo que fue antes de 1960, año en que contrajo matrimonio con mi padre, tras su vuelta de Horcajo y de Madrid.


La otra es una adquisición reciente. Es una foto de 1960 de la antigua "Caseta de la Amistad", durante la feria del mediodía. La caseta está engalanada con las tradicionales lonas y repleta de público. A su lado vemos unas bicicletas y una silla de ruedas. La barra estaba montada fuera de la parte techada, cubierta por un toldo o lona, para ganar espacio. Es en las ferias de mayo, en la primavera, cuando hemos podido disfrutar de la feria de día, al no hacer todavía el calor que nos impide en agosto estar en la calle con las altas temperaturas. Así se ve en la foto, cedida por José Luis de las Heras, hijo de José de las Heras, el autor de la imagen, a quien agradezco su colaboración. 

¡Disfruten de las fiestas! que, para descansar, ya vendrá el lunes.

miércoles, 17 de mayo de 2017

Una tarde para la historia y la leyenda: Manuel Díaz, Julio Benítez y Javier Benjumea torean en Palma del Río


Mañana comienza la Feria de Mayo de Palma del Río. Como en otros años se ha publicado una revista de Feria, con colaboración del Ayuntamiento palmeño y de casas comerciales y empresas, editada por la Editorial Coleopar Ceparia e Imprenta Lopera. Una edición de mucha calidad, que se agota pronto y que, además de encontrarse gratis en diversos puntos de distribución, es enviada a muchas personas, especialmente a palmeños y palmeñas que viven fuera de nuestra ciudad. Este año han contado conmigo para publicar un artículo sobre el festejo taurino que protagonizaron Manuel Díaz y Julio Benítez (ambos con el apodo de "El cordobés") y Javier Benjumea, junto a otros artículos más. Agradezco el honor de haber sido invitado. Este es el artículo que publico en dicha revista, que fue presentada y puesta en circulación el pasado viernes. 


"Una tarde para la historia y la leyenda: Manuel Díaz, Julio Benítez y Javier Benjumea torean en Palma del Río

Recuerdo, cuando yo era niño, que se reunían familiares y amigos con mi padre, en nuestra antigua casa, para ver en televisión las corridas de toros que retransmitían. Fue cuando me aficioné a este mundillo y este arte. Era en los años sesenta, y una figura de Palma empezaba a convertirse en ídolo de masas, Manuel Benítez “El Cordobés”. El nombre de Palma del Río sonaba por aquellos tiempos en el mundo entero gracias a la figura de este matador, que estaba revolucionando el mundo de la tauromaquia. No era el único hijo de esta tierra que se dedicaba al mundo del toro por entonces: Manuel Fuillerat Nieto “Palmeño” (hijo de Julio Fuillerat García “Palmeño”), Pedrín Benjumea (sevillano, pero residente en Palma), Antonio Ruiz “El Barquillero”, Santiago Morales “El Arrojao”, Vicente Linares, etc. Un plantel numeroso de profesionales del toro bravo (incluyendo otras actividades, como picadores, ganaderos, novilleros, subalternos...) hicieron que Palma se conociese como “cuna de grandes toreros”, como rezaban aquellos anuncios que había a las entradas del pueblo, en forma de burladero.

Dominique Lapierre y Larry Collins, publicaron entonces un libro, “O llevarás luto por mí”, que contribuyó a hacer del diestro, además de figura, una leyenda, pues se destacaba en él el personaje humilde que logra fama y riqueza con mucho valor y tenacidad. Ese libro lo vi en casa, aunque no lo leí. Ha sido no hace mucho, con una edición nueva, sin la censura que entonces sufrió, cuando lo he podido leer. En el libro aparece un personaje, Manuel Ruiz, “Charneca”, hostelero que apoyó a Benítez de joven y que convirtió su bar en un santuario dedicado al torero, y al mundo del toro. En Palma había dos peñas: la del bar “Charneca”, dedicada a “El Cordobés”, y la Peña “El Palmeño”, donde se reunían los partidarios de Manuel Fuillerat (que se anunciaba siempre como “Manuel García Palmeño”, como su padre, tal vez por lo exótico de su apellido real). Mi padre acudía con frecuencia a la última, hasta que cerró. Y en la familia teníamos un primo casado con una hermana del torero, además de otros miembros relacionados con el mundo del ganado.


Tras algunos años la leyenda de “El Cordobés” decayó, como el mundo del toro en general en Palma. El no tener plaza fija, de obra, era un inconveniente. No obstante, la afición y la vocación por este arte no se extinguieron. Surgieron otros toreros en Palma, en décadas posteriores. Se han celebrado novilladas y corridas, algunas presididas por mí en mi etapa de concejal. Una novillada, que no presidí, a beneficio del Hospital de San Sebastián, tuvo lugar en 1993 (Ver nota 1) en una plaza portátil. En ella, Manuel Díaz, antes de tomar la alternativa, se encerró con seis novillos. Ya se comentaba que el padre (no oficial todavía) le ayudaba, aunque se disputasen el apodo “El Cordobés”. Hubo mucha expectación. Estuve allí cuando se presentó en el Hospital, y, tras salir del coche, y saludar a los presentes, una paisana (cuyo nombre me reservo, lógicamente) dijo a los presentes "es igualito que su padre". Esa “presunta” relación del joven novillero, ya en el candelero, con nuestro paisano hizo que el festejo fuese un éxito.

En 2003 Julio Benítez, hijo de Manuel Benítez y Martina Fraysse, también apodado “El Cordobés”, Antonio José Sánchez (“Sánchez de Palma”), el rejoneador Pedro Cárdenas, Javier Benjumea, y el mismo Manuel Benítez, participaron en un festival taurino, también a beneficio del Hospital de San Sebastián. Comí con “El Cordobés” padre, el cura Isidro (gerente de la residencia de ancianos del Hospital) y otros, en el Hotel Castillo, pues me tocó presidir otra vez el festejo. Había mucha expectación, pues suponía la reaparición de la leyenda palmeña en los ruedos de nuestra ciudad, tras haberse retirado hace años. Tanta emoción e interés concitó entre la gente, que la corrida empezó tarde porque no pude acceder a la Presidencia a su hora, del atasco que había, en pasillos y escaleras. Recuerdo que tuve que subir desde el callejón, ayudado por un agente de la Guardia Civil, “escalando” el tendido repleto de público. Para colmo ese día Julio se lesionó una rodilla, al cogerle un animal, y su padre tuvo que matar su novillo, al llevárselo al hospital. Respiré aliviado cuando terminó el espectáculo, pero el respetable disfrutó con el ídolo de nuevo en casa.


Aquel día de la reaparición de “El Cordobés”, proclamado ya quinto “Califa del Toreo”, éste tuvo oportunidad de compartir plaza con el vástago de otra de las figuras, coetáneo de Benítez, Pedrín Benjumea, que, aunque era natural de Herrera (Sevilla) se afincó en Palma del Río de niño: Javier Benjumea. Este torero ha lidiado varias veces en Palma. Sus últimas apariciones fueron, una en la Feria de Mayo de 2009, en una novillada, que presidí, cuya recaudación fue destinada a la restauración de una de las capillas de la Iglesia del antiguo Convento de San Francisco, meses antes de tomar al alternativa en Écija. Un festejo que no llenó plaza (¡qué difícil es sacar a la gente de la feria para ir a los toros en Palma!), hasta llovió, pero donde todo al final salió bien, quedando contentos los novilleros, el ganadero (el ganado fue bueno, cosa rara en un festejo celebrado en plaza portátil), el empresario y el público asistente. Y otra, su última aparición, hace dos años, junto a dos figuras del momento, el jerezano Juan José Padilla y el granadino David Fandila, "el Fandi". Todo un cartel de lujo por los diestros, que no por el ganado, aunque disfrutamos por la valentía de Padilla, el buen hacer del Fandi y las ganas del joven Benjumea.

Desde hace algo más de un año, Manuel Benítez ha sido protagonista no ya de la prensa taurina, sino de los medios “del corazón”. Manuel Díaz presentó contra él demanda de paternidad y la Audiencia Provincial de Córdoba falló en su favor en 2016, declarándolo hijo biológico del torero. También se ha separado de Martina y hasta ha encontrado nueva pareja en otra palmeña. La gran noticia vino con la aparición de los dos “recientes” hermanos toreros en una primera corrida en Morón de la Frontera (Sevilla) en marzo de este año, donde se esperó la presencia del patriarca, sin éxito. El 22 del pasado mes de abril tuvimos la oportunidad de ver en Palma del Río a los herederos de las dos dinastías de toreros comentadas, la de Manuel Benítez y la de Pedrín Benjumea. Julio y Manuel hacían su segundo paseíllo juntos, compartiendo cartel con Javier, en una corrida que provocó el interés de los medios de comunicación y del público. De nuevo todos esperábamos la asistencia del torero palmeño, para ver a sus sucesores en el arte de Cúchares, con nombre artístico similar, y con el aliciente de celebrarse el festejo en la tierra del primero. Y, de nuevo, nos quedamos con las ganas. Los hermanos se encuentran encantados de torear juntos, y disfrutan de su nueva cercanía profesional y familiar. El padre no parece tan contento. 


Fue una tarde de toros con aforo completo y con el cartel de no hay billetes en la taquilla. Con la presencia de multitud de medios de comunicación, aficionados y curiosos, deseosos de ver a los diestros, sus familias y todo el espectáculo mediático montado. Los toreros hicieron todo lo posible por agradar al respetable, que les premiaron con su afecto y peticiones de orejas, concedidas con generosidad por la presidencia. El ganado fue lo peor de la tarde, escasos de fuerzas, algunos rajados nada más salir del encuentro con el picador, manseando otros... Una pena que se trate así al público de una plaza portátil, que ha pagado una entrada a precio de plaza de primera. Sin embargo, disfrutamos del repertorio de recursos de los toreros, ya que se emplearon bien en sus faenas. Gustaron los “guiños al tendido” de Manuel Díaz, con su habitual habilidad para conectar con el público, y sus lances efectistas, incluyendo el famoso “salto de la rana” del padre. Julio Benítez, que está enderezando su carrera, dio muestras de mejor hacer que en tiempos pasados, y con ganas de agradar a un tendido entregado, también luciéndose con la muleta y con desplantes y otros adornos. Javier Benjumea, muy torero, bien con el capote y que, de no haber tenido un toro (el primero) que se paraba a cada embestida, habría encandilado al buen aficionado con serias tandas de naturales, dando muestras de no quedarse atrás y ganarse el favor de la concurrencia. Salieron los tres a hombros de la plaza.

Una tarde entretenida donde se cruzó la historia y la leyenda, donde estuvo presente la realidad y también el mito, el recuerdo del pasado y la esperanza del futuro de la fiesta. Un acontecimiento único que hubiera enganchado a aquellos aficionados de los sesenta y setenta (algunos todavía vivos y, seguro, presentes en la plaza), como los que se sentaban en mi casa para ver la correspondiente corrida televisada. Un día en que Palma volvió a ser la cuna de grandes toreros que antaño fue."

(Nota 1. En la revista aparece la fecha de 1993, cuando, en realidad, este festejo tuvo lugar el 19 de mayo de 1995. La fecha publicada es la que dio el mismo torero en la rueda de prensa que se celebró para anunciar la corrida, en el Convento de Santa Clara, y que recogió la prensa. De la noticia la cogí y así ha pasado a mi artículo. Pido disculpas por ello. De haber comprobado mis agendas, habría usado la fecha real, como publicó el historiador Juan Antonio Zamora en otro artículo de la misma revista. De todas formas, esa errata no empaña el fondo de lo relatado: el festejo a beneficio del Hospital de San Sebastián, en el que por primera vez toreó, en Palma del Río, Manuel Díaz.)

viernes, 12 de mayo de 2017

La foto del viernes: Les Luthiers, premio Princesa de Asturias


El genial grupo argentino Les Luthuiers ha sido galardonado con el premio Princesa de Asturias de Comunicación y Humanidades. Merecidísimo galardón tras cincuenta años haciéndonos reír de forma inteligente. Este año vienen a España en su gira. Será la ocasión de verles por primera vez por mi parte. Traen su antología "Chist". Nos hemos apresurado a comprar ya las entradas, por si el premio provoca avalanchas de espectadores. En septiembre estarán en el Teatro de la Maestranza de Sevilla. Allí espero estar y gozar de su buen hacer. ¡Felicidades!

martes, 9 de mayo de 2017

Bikinis, fútbol y rock & roll


Así se llama el nuevo libro de Adrian Vogel, un libro donde narra, desde la perspectiva que este hombre ha vivido (la música pop sobre todo) el paso del Franquismo a la democracia actual. Un libro de investigación que nos cuenta que, gracias a cierta perspicacia de los gerifaltes de entonces, las cosas que estaban cambiando el mundo en los años sesenta y setenta, fueron entrando en España, dosificadas, consiguiendo que no nos rebelásemos y cambiásemos el statu quo de forma radical. Lo que luego se llamó el "Franquismo sociológico". Un repaso por la historia reciente en forma de "crónica pop", repleta de datos y anécdotas.


"Bikinis, fútbol y rock & roll" ha sido editado por el Grupo Akal, y cuenta con el prólogo de El Gran Wyoming. Yo no me podía resistir a comprarlo, y ayer me llegó. Otra adquisición para hacer paréntesis de lectura, durante la preparación de las oposiciones.

Adrian Vogel, a la derecha, con Michael Jackson

De Adrian Vogel (periodista, futbolero (merengón de pro) promotor musical, ejecutivo de discográficas, conferenciante... tal vez el más entrevistado en España cuando murió Michael Jackson) ya os he hablado varias veces, incluso he comentado alguna otra publicación suya, como el eBook Mi mundial Brasil 2014. Tiene un blog, El Mundano, muy recomendable, que nació un mes antes que el mío, donde he tenido el honor de publicar diversas entradas sobre temas musicales, como Un siglo de canciones 17: “Este Madrid” (por Francisco Javier Domínguez “Schevi”), que, por cierto, aparece en el listado de post más vistos. Supe de sus andanzas con aquel programa que emitían en RNE, Para vosotros jóvenes, que recordé en un emotivo post sobre mis aprendizajes con el mundo de la radio. Espero disfrutar de su nuevo trabajo. Y ¡anímense! búsquenlo, que seguro lo gozan.

domingo, 7 de mayo de 2017

Ganó Emmanuel Macron, perdió el fascismo


A estas horas parece que el resultado de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales en Francia ha sido la victoria de E. Macron, con más de un 60% de los votos, sobre la candidata del Frente Nacional, Marine Le Pen, la esperanza de la extrema derecha, el fascismo francés. Hace cinco años festejé la victoria del socialista François Hollande, como una forma de resistencia a los dictados de la canciller alemana Angela Merkel. Una decepción esta presidencia, en uno de cuyos gobiernos estuvo como ministro de economía Macron, entonces socialista, y que abandonó el gobierno y el partido socialista francés para fundar otro que superase el tradicional dualismo entre izquierda y derecha. No confío ahora nada en las políticas "progresistas" (según él) que quiere implementar el nuevo presidente. Pero festejo que haya derrotado al fascismo francés, que ha sacado un número importante de votos, por cierto, captando a las clases menos favorecidas, decepcionadas con los partidos de izquierda (no solo el partido socialista, ojo). El peligro sigue patente, pero los franceses han optado por parar los pies a Le Pen, envalentonada por el avance de la extrema derecha a nivel mundial. Algunos cretinos, movidos por su "pureza inmaculada", querían desentenderse de esta votación por considerar a los dos candidatos como "la misma derecha". Los franceses no han caído en esa trampa. Afortunadamente. Hoy también puede sonar con brío "La Marsellesa", como cuando en la película Casablanca, los clientes del bar se opusieron a los nazis, de forma digna y pacífica.


martes, 2 de mayo de 2017

Fundación y refundación del PSOE


El PSOE fue fundado en 1879, en Madrid, hace 138 años. Fue en la calle Tetuán, en el bar Casa Labra. Asistieron 25 personas: 16 tipógrafos, dos joyeros, un marmolista, un zapatero, cuatro médicos y un doctor en ciencias. El movimiento obrero era fundamentalmente anarquista en España, formando parte de la Primera Internacional, pero el mismo Karl Marx se ocupó de que su yerno, Paul Lafargue, intentase que las ideas socialistas se implantaran en nuestro país. Para ello contactó con algunas personas, entre ellas Pablo Iglesias. Éste, con ese grupo de veinticinco personas, fundó el Partido Socialista.


Vivimos momentos de incertidumbre. La crisis que padece el PSOE no parece que amaine. Es más, las primarias convocadas para elegir secretario general están dividiendo a la militancia, y dejando salir a la luz formas y mensajes que se salen de lo normal, llegándose incluso hasta el insulto y el enfrentamiento personal, especialmente en las redes sociales, ya que internet está amplificando el ruido provocado por estas disputas de poder. Yo, hace tiempo, propugné la refundación del PSOE, ya que considero que debemos dar un buen repaso al partido, para recuperar mensajes, programa de izquierdas y credibilidad, en lugar de caer en las luchas cainitas que estamos sufriendo. No ha sido el camino escogido. Y eso me tiene decepcionado. Hoy día, aniversario de la fundación, no sé si recuperaré la ilusión, pero sí recupero una imagen del verano pasado, cuando estuvimos en Casa Labra, el lugar donde nació el Partido Socialista. Al menos allí pasamos unos buenos ratos en nuestra visita a Madrid.

lunes, 1 de mayo de 2017

Día del trabajo: los mártires de Chicago


Nos estamos acostumbrando a conmemorar el 1 de mayo como una fiesta no laborable más. La primavera nos impulsa a disfrutar del buen tiempo y el ocio, buscando la diversión y el placer, para dejar atrás los problemas y las tensiones del día a día. Y estamos olvidando el origen de esta fecha. Fue la Segunda Internacional (la que surgió tras la escisión de la primera, por el enfrentamiento entre socialistas, influidos por K. Marx, y anarquistas, seguidores de Bakunin) la que instauró esta fecha en recuerdo de los llamados "mártires de Chicago". Éstos fueron unos trabajadores condenados a muerte (en su mayoría, otros fueron condenados a prisión) en Estados Unidos, tras una huelga para conseguir la jornada de trabajo de ocho horas. En estos tiempos en que se ha retrocedido tanto en derechos laborales y políticos, es más necesario que nunca no olvidar este origen, para volver a dar su significado de lucha a este día.