La telaraña te atrapa. La telaraña atrae a sus incautas víctimas, que buscan la salida hacia el sol. Éste se asoma por detrás, como una promesa. O, tal vez, como otra trampa que engaña con su luz. Una luz que fríe la piel del ingenuo insecto. Yo, por si acaso, me quedo tras las líneas. Ni caeré en la trampa, ni me quemaré con los rayos del sol.
1 comentario:
Muchas gracias, María. Y ¡feliz cumpleaños!
Buen fin de semana, caluroso y relajado.
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