lunes, 28 de abril de 2014

Reconocimiento tras 35 años de democracia municipal


El poder político tiene memoria selectiva. Muy selectiva. Tiende a hablar de futuro, asentándose en el presente, y olvidando el pasado que no interesa. Quienes han tenido poder y lo han perdido, por uno u otro motivo, lo saben muy bien. Es habitual "reinterpretar" y hasta "reescribir" el pasado, la historia, por parte de quienes tienen poder, para acomodarlo a sus preferencias. Eso también pasa en el seno de los mismos partidos políticos. Quien llega a ostentar responsabilidades tiende a "poner su sello", cosa que no está mal. Al contrario, es preciso renovar mensajes, acciones, proyectos, para mejorar el presente y encauzar el futuro. Pero muchas veces se tapa tras un tupido velo de silencio e invisibilidad, se olvida a quienes nos han precedido. Un error, pues nadie carece de pasado, y somos lo que hacemos, más lo que nos han dejado, legado, los que nos han precedido. Por eso está muy bien, sobre todo en estos tiempos en que se habla tanto de "memoria histórica", recordar el pasado, nuestra Historia, con sus aciertos y sus errores. Hacer balance del tiempo transcurrido, y valorar las experiencias vividas, para corregir errores y apuntalar los aciertos. 

En este mes de abril, que está terminando, se cumplen 35 años desde las primeras elecciones municipales de la Democracia, tras la aprobación de la Constitución de 1978. Son muchos los actos que se han venido sucediendo para recordar la fecha del 3 de abril de 1979, cuando se pudo por primera vez, tras la Dictadura, votar a los representantes ciudadanos en la Administración local. En Palma del Río, también se están conmemorando aquellas elecciones y otros hechos posteriores. El PSOE, partido al que sigo perteneciendo (dejé el cargo de concejal en 2011, pero no he dejado nunca la política), también festejó aquel acontecimiento ayer, con una exposición de los 35 años de gobierno en nuestra localidad, con la entrega de distinciones a la Comisión Ejecutiva local del 79 y el reconocimiento a los afiliados con 25 años de militancia, y un almuerzo de convivencia. En el acto hablaron los tres alcaldes que ha tenido Palma del Río, hasta la fecha, Manuel López Maraver, Salvador Blanco Rubio y José Antonio Ruiz Almenara, además del Secretario General provincial, Juan Pablo Durán. 


Miembros de las reorganizadas Juventudes Socialistas hicieron entrega de las distinciones. Resumir 35 años de gobierno municipal en una exposición es tarea difícil, porque es mucho el tiempo para plasmar en imágenes y recuerdos, porque no todos tienen conocimiento o memoria de un pasado tan extenso y rico en acontecimientos y personas, y, sobre todo, si tenemos en cuenta lo que decía al principio, porque la memoria es selectiva. Así que quedaron cosas y algunas personas por destacar. Pero, como decía un compañero que tuvo responsabilidades provinciales de alto nivel, con el que hablé al final del acto, está bien que estas actividades se hagan, porque se insufla ánimo en quienes tienen un compromiso sin interés personal de por medio. Y también porque se debe valorar el papel de mucha gente que ha dado lo mejor de sí para servir a sus conciudadanos, y que en estos momentos sufren la animadversión de muchos por haber calado muy hondo ese desprecio hacia todos los que se dedican a la política, a causa de unos pocos aprovechados que han corrompido esta noble tarea por la que lucharon en aquellos tiempos que recordamos. 

A mí también me dieron esa placa que muestro en la foto, al haber superado los 25 años de militancia. Como a otros compañeros y compañeras más. Un "caso único" que ha estado además en el ayuntamiento palmeño con tres alcaldes, como teniente de alcalde, como recordó Salvador Blanco, al recoger su placa. Le di las gracias personalmente por la mención y el halago que con ello me hizo. No está mal que se acuerden de uno para algo más que para arrimar el hombro cuando hace falta. Por formar parte de esa historia, no 25, sino más de 30 años. Historia que hemos hecho entre todos. Y que, como decía al principio, merece la pena no olvidar. 

3 comentarios:

Francisco Javier Domínguez Peso dijo...

Por cierto, Salvador también recordó a Miguel Santos, mi suegro y padre de José Miguel, que presentó el acto. Ya fallecido y que recibió su homenaje como uno de los veteranos de la agrupación local.

Jesús Herrera Peña dijo...

¡¡Qué bonito, Francisco Javier!!
Qué bonito y qué envidia da. Espero que sea de la sana.
A mi me cabe el honor (en mi caso, el honorcito) de haber formado parte de esa pléyade de españoles que inauguraron la democracia municipal el 3-4-1979 y luego tomaron posesión de los ayuntamientos el día 19 del mismo.

A los socialistas palmeños que se les haya ocurrido esa ocurrencia, demuestran tener sensibilidad, tacto y gratitud hacia unas personas que han desempeñado esos honrosos cargos en nombre de unos ideales que (es verdad) hay están muy devaluados y tambaleantes.

Mis felicitaciones a ti y a los demás de la foto.

Francisco Javier Domínguez Peso dijo...

Muchas gracias, Jesús. Estos momentos son necesarios. Quienes creen que la política es algo noble y lo demuestran se merecen un reconocimiento. Ahora muchos no verán como valioso que el Estado y todas sus instituciones lo formen representantes elegidos por el pueblo, pero lo es. Cuando se aplique la reforma local y desaparezcan ayuntamientos, para ser sustituidos por delegados elegidos a dedo por otros mandamases, la gente se dará cuenta de lo necesario que es votar a tus gobernantes. En 1979 eso era así, no se podía elegir los que dirigían los ayuntamientos, y a eso nos quieren volver a llevar los que ahora gobiernan. Por eso es necesario recordar y homenajear a quienes tuvieron el valor de pedir el voto de sus ciudadanos, como lo hiciste tú, sin experiencia, pero con mucha voluntad de servicio.